El Madrazo

Aquiles Transo / El Madrazo

A Rosario (Chayito) Robles Berlanga, ex titular de la Secretaría de Desarrollo Social (Sedesol), Quintana Roo le venía bien, pues era tratada como reina por Beto Borge, el gober quintanarroense que cuando terminó su gestión (2016), cayó en la cárcel, después de que la Interpol lo detuviera en Panamá; el que fuera uno de los rey de reyes de Enrique Peña Nieto, se había despachado con la cuchara grande, mediante el despojo y la tranza.

Pero Beto le cayó bien a Chayito no por su singular y regordeta figura, sino porque encontró un cómplice para desviar 903 millones de pesos, de los programas sociales contra la pobreza.

Betito le pidió al pequeño Sistema Quintanarroense de Comunicación Social que recibiera de Chayito 806 millones de pesos, para “invertirlos” en la producción de una campaña de promoción de la Secretaría de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano (Sedatu) de Quintana Roo, así como otros 97 millones para el mismo fin, que recibió la Universidad Politécnica de Quintana Roo. Ese presupuesto se asignó a ocho empresas relacionadas con Betito, y por ahí fue que se fugó el dinero público.

La Fiscalía General del Estado de Quintana Roo está tras la pista de ese recurso, que salió de la Sedesol y fue a parar a empresas fantasma, en 2015 y 2016.

Los 903 millones de pesos, representan el 23 por ciento del total de la Estafa Maestra. Este porcentaje, de acuerdo con la Auditoría Superior de la Federación, es el más amplio del cual se tiene registro que en cualquier otra parte del país, de la operación que drenó el erario y tuvo como destino varias universidades del país.

Beto ya está tras las rejas; falta el turno de Chayito.