Redacción El Madrazo

En la defensa lleva la penitencia, el “periodista” Jorge Castro Noriega: ‘Cómo me hubiese gustado ser gatillero de Borge’, fue su respuesta en un largo, pero excesivamente largo artículo (¿habrá pretendido ser columna?) en el que sólo justifica su actuar, durante los dos últimos sexenios, y en especial el de Roberto Borge Angulo, el peor gobernador que haya tenido Quintana Roo en su historia.

Lee la defensa de Jorge Castro aquí: http://www.jorgecastronoriega.com/columna-como-me-hubiese-gustado-ser-gatillero-de-borge/

Castro Noriega llegó a Quintana Roo para dirigir el periódico Que Quintana Roo se Entere (hoy Quequi), con cuyo dueño, Pepe Gómez, se enemistó en 2005. Desde ese entonces, deambuló como director editorial de la revista Luces del Siglo y Diario Respuesta, de este último también salió enemistado con los dueños, los hermanos Heriberto y Alberto Millar. Cobijado por Miguel Cantón Zetina, abrió el semanario La Voz de Quintana Roo, en el cual estuvo al frente poco más de un lustro, hasta que ese medio mutó al diario Quintana Roo Hoy, en el cual tuvo un efímero paso como director editorial.

Aunque lo niegue, Castro Noriega siempre se ha aprovechado del poder: Tuvo un programa de radio, En Voz Alta, auspiciado por el gubernamental Sistema Quintanarroense de Comunicación Social, desde el gobierno de Félix González Canto. Un conflicto de interés evidente, pues trabajaba al servicio de la iniciativa privada en periódicos, y al mismo tiempo, servía a los intereses del gobierno en turno, en el micrófono gubernamental.

Castro Noriega no tiene título profesional, ni cédula que lo avale, de acuerdo al Registro Nacional de Profesionistas, de ahí su ‘flexibilidad’ ética para aclarar que los convenios entre medios y gobiernos son un asunto natural, cuando él mismo sabe que es lo más antinatural que hay, puesto que dichos convenios han sido una mordaza para los medios, incluidos los que él ha dirigido, y un eficaz mecanismo de control de las líneas editoriales de los gobiernos en turno.

Las preguntas necesarias, que Castro Noriega deberá responder, son simples:

1. ¿Cuánto factura mensualmente a gobiernos de los dos niveles (estatal y municipal), como “periodista” y por su sitio en Internet  Jorge Castro Noriega?

2. ¿Cuál es el concepto de lo que factura a los gobiernos estatal y municipal?

3. ¿Desde cuándo factura sus servicios?

4. ¿Por qué miente descaradamente sobre su patrimonio, pues a su “pobre” camioneta Pick Up 2004 habría que agregar un BMW?

5. ¿A cuántos viajes a ferias turísticas, giras de gobierno, etc. fue invitado por las administraciones de Félix González Canto y Roberto Borge Angulo, con cargo al erario?

Responder con claridad no es una violación a sus derechos humanos, es tener respeto por los cientos de contribuyentes que pagan sus facturas, y para aclarar qué parte del ejercicio periodístico incluye canonjías gubernamentales. (Foto: Cancunissimo.com)