El Madrazo

Redacción / El Madrazo

No habían pasado ni dos días de que el gobernador de Quintana Roo, Carlos Joaquín González, había expresado que estaba obteniendo poca cooperación del alcalde de Benito Juárez, tras los acuerdos de mano coordinado firmados además con los municipios de Solidaridad y Othón P. Blanco,  cuando Remberto Estrada Barba envió a la prensa su fotografía con el secretario de Gobernación, Miguel Ángel Osorio Chong.

Un boletín resume la intención de esa reunión:

“Estoy convencido de que mediante el trabajo en equipo es como daremos los mejores resultados; es a través de la estrecha colaboración entre los tres órdenes de gobierno como se han ido disminuyendo los índices delincuenciales en Cancún”

Sin embargo, no solo no se han disminuido los índices de delincuencia en el Cancún de 10 de Remby, sino que se están incrementando.

La reunión de Estrada Barba con el huésped de Bucareli, en la Ciudad de México, no sólo buscaba el manto protector de la Federación, cuyos gendarmes poco o nada han hecho en su larga estancia en el principal destino turístico de México. Quería reforzar el aval hacia su súper asesor en materia de Seguridad, Julián Leyzaola Pérez, cuya designación en Seguridad Pública ha sido fuertemente cuestionada por las comisiones nacional y estatal de Derechos Humanos. (Foto: Ayuntamiento de Benito Juárez)